El Parque Nacional Waraira Repano (El Ávila) fue un escenario el viernes de un evento raro y profundamente significativo: la liberación de varias especies salvajes que volvieron a su hábitat natural, después de un largo proceso de crianza y rehabilitación en el zoótorio de San Antonio Abad.
El día, que reunió a representantes institucionales, comunidades indígenas y especialistas en fauna, se convirtió en un verdadero acto de esperanza en las faldas del gran pulmón de plantas de Caracas.
Esto muestra que la conservación no es un esfuerzo distante o aislado, sino una misión que también se puede cumplir en entornos urbanos.
Especies liberadas:
– 4 Melleros Bears (Tamandua tetradactyla)
– 8 Tucacitos verdes (Aulacorhynchus sulcatus)
– 7 boas constrictor (trago)
– 2 Mapanares (Atrox Botrops)
El evento también estuvo marcado por la presencia de representantes indígenas de la Misión de la Madre Tierra, quienes hicieron un ritual de agradecimiento y reconexión con la naturaleza.
A través de canciones, ofrendas y oraciones ancestrales, los líderes espirituales recordaron que la liberación de la fauna no es solo un acto científico, sino también un gesto espiritual que honra la relación de equilibrio entre el ser humano y la Madre Tierra.
Por su parte, Félix Alvarado, gerente del Zoocriato, enfatizó que «cada espécimen que regresa a su entorno natural significa una victoria contra la amenaza de extinción. Es un compromiso renovado con la biodiversidad venezuela».
Al comunicado asistieron representantes del equipo de gestión ecosocialista, la comunidad indígena de la Misión Mother Earth y autoridades de organizaciones como DGCIM, CICPC, Ministerio Público e Inparques.
El EcoGreeen & Life CA Zoocrio reafirmó que esta liberación es parte de un trabajo continuo. Durante años, ha sido promovido por rescate, rehabilitación y reproducción controlada de especies amenazadas, en alianza con instituciones nacionales e internacionales.
La Waraira Repano, más que un pulmón natural para Caracas, se convirtió este viernes en un acto de esperanza y vida, donde la naturaleza recordó que todavía es posible recuperar a los perdidos.
El valor de cada especie
– Melleros Bears: mamíferos insectívoros de hábitos nocturnos, excelentes escaladores gracias a su cola presionada y sus fuertes garras. Su dieta se basa en hormigas, termitas y miel, desempeñando un papel clave en el control de plagas.
– Tucacitos verdes: conocido como botella de esmeralda Pico e ‘, cumplen una función vital en la dispersión de semillas.
– Boas Constrictor: reptiles no predominales que regulan las poblaciones de pequeños mamíferos, fundamentales para mantener el equilibrio de los ecosistemas.
– Mapanares: serpientes venenosas con un papel importante en la cadena alimentaria, aunque también responsable de los accidentes ofrecidos por su comportamiento defensivo.





