El piloto británico Lewis Hamilton está pasando por uno de los momentos más difíciles de su vida personal después de confirmar la muerte de Roscoe, su bulldog inglés, quien durante más de una década se convirtió en una presencia constante en los circuitos de Fórmula 1 y en la vida del campeón mundial de siete tiempos.
Hamilton había compartido hace días que Roscoe enfrentó una recaída de neumonía, obligada a hospitalizarlo de emergencia. Como lo explicó el propio piloto, Bulldog fue sedado para facilitar la respiración, pero durante el proceso sufrió un paro cardíaco que lo dejó en coma. Los médicos lograron estabilizarlo, sin embargo, su condición nunca mejoró.
«Por favor, mantenga a Roscoe en sus pensamientos», escribió Hamilton en las redes sociales, donde mantuvo a sus seguidores informados sobre la salud de su perro, que se discutió durante cuatro días relacionado con el soporte vital.
La despedida más dura
Este lunes 29 de septiembre, Hamilton dijo que había tomado la dolorosa decisión de dejar a Roscoe. En un mensaje lleno de emoción, el piloto de Ferrari dijo:
«Después de cuatro días de soporte vital, luchando con cada pequeña fuerza que tuve, tuve que tomar la decisión más difícil de mi vida y decir adiós a Roscoe. Nunca dejó de pelear, hasta el final. Me siento muy agradecido y honrado de haber compartido mi vida con un alma tan hermosa, un ángel y un verdadero amigo».
Los británicos también recordaron a Coco, hermano de Roscoe, quien murió hace cinco años, y reconoció que nunca había tenido que enfrentar la decisión de practicar la eutanasia a una mascota. «Es una de las experiencias más dolorosas y siento una profunda conexión con todos los que han pasado por la pérdida de un ser tan amado», agregó.
Un icono dentro de la Fórmula 1
Más allá de ser la mascota de Hamilton, Roscoe se convirtió en parte de la cultura de la Fórmula 1. Con más de 1.4 millones de seguidores en Instagram, era habitual verlo en el paddock, acompañando a su dueño durante las competiciones, robando la atención de los fotógrafos, los fanáticos e incluso otros pilotos.
El carismático bulldog no solo viajó por el mundo con Hamilton, sino que incluso tuvo una carrera como modelo, ganando el afecto de la comunidad automotriz y el público en general.
La noticia de su muerte generó mensajes de apoyo hacia Hamilton. Tanto Fórmula 1 como Scuderia Ferrari publicaron tributos en memoria de Roscoe, reconociendo el lugar especial que ocupó en el deporte.
«Gracias a todos por el amor y el apoyo que han mostrado a Roscoe a lo largo de los años. Ha sido muy especial presenciarlo y sentirlo», concluyó Hamilton en su despedida, revelando que su fiel compañero murió en sus brazos en la tarde del 28 de septiembre.





