En los últimos días, las autoridades de seguridad han destruido cinco campos construidos en la zona fronteriza venezolana con Colombia, informó el ministro Diosdado Cabello.
«Nuestras fronteras están protegidas. La guerra que tienen en Colombia con grupos paramilitares irregulares tiene una guerra histórica que tiene Colombia; no tiene nada que ver con nosotros», dijo Cabello, quien enfatizó que las autoridades policiales venezolanas y los miembros de las fuerzas armadas nacionales bolivararias están listas para proteger las zonas binacionales.
«Desafortunadamente, no podemos decir eso en el lado colombiano», dijo Cabello.
En este sentido, los agentes militares destruyeron un campamento de logística en el Rosario de Agua Linda, Puerto Ayacucho, Amazonas.
La información fue proporcionada por Domingo Hernández Lárez, Jefe del Comando Estratégico Fangesus -Operational (CEOFANB), quien descubrió que tal infraestructura pertenecía a los grupos de Toncol: medicamentos colombianos armados.
En este punto, encontraron cargadores de rifle AR15 y gorras, que aludieron a la Segunda Marquetalia, un grupo disidente de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), al que el presidente del país vecino Gustavo Petro, fue responsable del asesinato del senador Miguel Uibe.