El presidente estadounidense, Donald Trump, afirmó este lunes que Israel ha ganado todo lo que puede conseguir por la fuerza de las armas y que ahora es el momento del premio final de la paz.
«Israel, con nuestra ayuda, ha conseguido todo lo que se puede conseguir por la fuerza de las armas. «Ahora es el momento de convertir estas victorias contra los terroristas en el campo de batalla en el premio máximo de paz y prosperidad para todo Medio Oriente», dijo Trump ante el Parlamento israelí.
Trump asegura que ayudará a la reconstrucción de Gaza
El presidente estadounidense aseguró que tiene intención de colaborar en los esfuerzos de reconstrucción de la Franja de Gaza y llamó a la población del enclave palestino a centrarse en esta labor.
«Los residentes de Gaza deben centrarse en restaurar las bases de la estabilidad, la seguridad, la dignidad y el desarrollo económico para que finalmente puedan tener la vida mejor que sus hijos realmente merecen». «Quiero colaborar en este esfuerzo, en el sentido de que vamos a ayudar», añadió.
Un día de «gran esperanza y fe renovada»
Trump destacó que este lunes, en el que se firmará el fin de dos años de guerra entre Israel y Hamás, es un día «de profunda alegría, de gran esperanza, de fe renovada», que marca no sólo el fin de un conflicto, sino de «una era de terror y muerte».
«Nos encontramos en un día de profunda alegría, de gran esperanza, de fe renovada», afirmó al inicio de su discurso después de haberse reunido poco antes con familiares de rehenes israelíes.
El líder republicano consideró que “este no es sólo el fin de una guerra, es el fin de una era de terror y muerte y el comienzo de una era de fe, esperanza y Dios”.
«Creo firmemente que este es el amanecer histórico de un nuevo Oriente Medio», añadió entre constantes aplausos, mostrando también su «profunda gratitud a todas las naciones del mundo árabe y musulmán que se unieron para presionar a Hamás para que liberara a los rehenes y los dejara ir».
Trump había sido recibido en el aeropuerto de Tel Aviv por el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, el presidente del país, Isaac Herzog, y miembros de la delegación estadounidense que ya se encontraba en Israel, encabezada por su yerno Jared Kushner y su hija Ivanka.
Tras su encuentro con los familiares de los rehenes y su discurso ante la Knesset, su agenda continúa en la ciudad balneario egipcia de Sharm el Sheikh, donde está prevista la llamada Cumbre de la Paz, a la que asistirán más de una treintena de países, más de una veintena de ellos representados por sus jefes de Estado o de Gobierno. EFE
