El impulso de programas de emprendimiento y empleo como VALLEmplea y ValleINN+ permitió que el 26% de los valunos tuvieran más dinero en los últimos 4 años. El Valle del Cauca celebra un avance histórico en materia de desarrollo social y económico: 417 mil vallecaucanos salieron de la pobreza monetaria en los últimos cuatro años, gracias a una estrategia integral liderada por el Gobierno del Valle del Cauca, en coordinación con el sector privado, la academia y las comunidades locales. Según la más reciente medición del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) en 2024, la tasa de pobreza monetaria en el departamento pasó de 35% en 2020 a 24,7% en 2024, reducción que supera el promedio nacional y ubica al Valle cinco puntos por debajo de ese promedio. “Este trabajo colaborativo que hemos hecho es lo que nos ha dado la posibilidad de poder reducir nuestra pobreza multidimensional con 400.000 personas fuera de la pobreza (un indicador clave que incluye el acceso a salud, educación, vivienda digna y servicios públicos), y ahora podemos reducir nuestra pobreza monetaria con otras 417.000 personas que ya tienen mejor poder adquisitivo y oportunidades”, dijo Dilian Francisca Toro, gobernadora del Valle del Cauca. Por su parte, Adrián Zamora, director de Corpovalle, aseguró que “la reducción de la pobreza monetaria es un resultado directo al bolsillo de los vallecaucanos. Cuando analizamos lo que ha pasado entre 2020 y hoy encontramos que hay una reducción importante”, agregó. Este indicador refleja una mejora sustancial en la capacidad de los hogares para acceder a bienes y servicios básicos como alimentos, vestido, vivienda y servicios públicos. Estrategias que dan resultados El éxito de esta reducción de la pobreza monetaria no es casualidad. Responde a un enfoque de gestión por resultados que el Gobierno del Valle ha implementado a través de programas como VALLEmplea, Fonder Valle y el Fondo ValleINN+, diseñados para promover la generación de ingresos, el emprendimiento y el fortalecimiento del empleo formal. Estos programas han servido como motores de movilidad social, permitiendo a miles de ciudadanos encontrar oportunidades de empleo, iniciar negocios o fortalecer sus unidades productivas, en sectores como la agroindustria, el comercio y los servicios. El modelo Valle del Cauca se ha consolidado como un referente nacional por su enfoque articulado y su capacidad de generar impactos tangibles en la calidad de vida de la población. Además de superar el promedio nacional en reducción de la pobreza, el departamento ha fortalecido su competitividad regional, lo que también ha atraído inversiones y dinamizado el mercado laboral. Jóvenes formados en VALLEmplea. “Hoy más personas en el Valle del Cauca pueden pagar el alquiler, comprar alimentos, cubrir servicios básicos y vestir dignamente. Esto se traduce en tranquilidad para las familias y oportunidades reales de progreso”, enfatizó Zamora. La reducción de la pobreza monetaria no sólo mejora los indicadores sociales, sino que también construye un entorno más equitativo y sostenible, alineado con los objetivos de desarrollo propuestos por la administración departamental. El compromiso continúa. El Gobierno del Valle insiste en que este no es un punto de llegada, sino un avance que impulsa nuevos desafíos. El objetivo ahora es consolidar los logros alcanzados, evitar retrocesos y seguir fortaleciendo las políticas sociales y económicas. Con cifras concretas, programas efectivos y trabajo articulado, el Valle del Cauca demuestra que es posible avanzar en la lucha contra la pobreza, mejorando la vida de miles de personas y sentando bases sólidas para un desarrollo más justo e inclusivo. Mirá también: La millonaria apuesta del Valle en estrategia y Fuerza Pública para defender a sus vallecaucanos





